Mi madre sigue fiel a si misma.
Me acaba de llamar para invitarme a una fiesta el martes.
Dice que prefiere dar las fiestas en su casa que ir a las de los demás, la verdad es que no le falta fuerza aunque se queja, está acostumbrada a ser de hierro y ahora de ha convertido en un metal menos fuerte, pero sigue haciendo chaquetitas para que a sus africanos no les falte de nada... Noblesse olbige.
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